Estados Unidos incrementó la presencia militar en Haití tras enviar un nuevo grupo de Marines para reforzar la seguridad de su embajada en Puerto Príncipe, en un momento marcado por el aumento de la violencia y el avance de las bandas armadas en el país.
Según informó Washington, el despliegue se realizó a solicitud directa de la embajada estadounidense y en coordinación con las autoridades haitianas, como parte de las medidas para proteger al personal diplomático y garantizar la continuidad de las operaciones.
En un comunicado publicado en X, la Embajada de EE. UU. en Haití señaló que este respaldo adicional permitirá mantener la asistencia a la Policía Nacional Haitiana y a la Fuerza de Supresión de Pandillas, iniciativas clave en la lucha contra las organizaciones criminales que dominan amplias zonas del país.
El refuerzo llega en un momento especialmente tenso, luego de que Jimmy Cherisier, alias Barbecue y líder de la coalición armada Viv Ansanm, instara a la población a permanecer en sus hogares ante la posibilidad de nuevos enfrentamientos con las fuerzas del orden, que mantienen una ofensiva sostenida contra los grupos delictivos.
Estados Unidos es uno de los principales aliados internacionales de la nueva Fuerza de Eliminación de Pandillas, aprobada por la ONU y destinada a enfrentar directamente a las bandas que operan en el territorio haitiano. Como parte de este apoyo, Washington también ha suministrado vehículos blindados y otros recursos para fortalecer la capacidad operativa de las autoridades haitianas.

